Si te atraen modas pasadas o te vuelve loca todo lo vintage tanto como a mí, quizás sueñes con una boda con el encanto romántico y único de épocas pasadas… La palabra vintage nos eboca sabor a nostalgia, a tiempos pasados. Cualquier objeto antiguo es vintage, pero también es sinónimo de un diseño artístico y de alta calidad… Hoy día es una paradoja: en el imperio donde reinan las novedades de la moda, se premia lo antiguo. Ahora, rescatar viejas prendas de otras décadas y combinarlas con nuevas modas con el fin de crear un look distinto, es tendencia. No se trata de asaltar el armario de tu abuela ni de intentar meterte en vestidos de cuando eras niña, puedes escoger accesorios y diferentes prendas para combinarlas con las prendas de temporada. Todo un hit.
Las texturas, formas y adornos antiguos no han pasado de moda, sino todo lo contrario. A partir del Belle Epoque, a medida que fueron pasando las décadas, y las mujeres se adueñaban de su feminidad, se sumaban tendencias y cambiaban los tipos de corte y patronajes en los diseños, los cuerpos se fueron invadiendo de encajes, se añadieron adornos y complementos. Cada dédaca tiene sus detalles de inspiración. Particularmente me apasionan los detalles naïf, los talles altos, los broches, sombreros y tocados… accesorios de lo más chic que otorgaban y ortogarán elegancia, glamour y distinción a estos diseños. Una novia vintage, será una novia dulce, delicada y romántica que nadie olvidará.
La mayoría de estas imágenes las he tomado de Style me pretty, donde podréis ver varios reportajes de preciosas bodas vintage y seguir tomando nota ya que ofrece multitud de ideas…